En una palabra: la decepción no vista. Eso me pasa por ir lleno de expectativas, seguro que iba a sacar dos semanas de posts de la visita. Pero no, esa vaina es terreno estéril. De nada por ahorrarles esos dos dólares.
La audiencia era 50% azafata extranjera y 50% empleados de banco con cara de perrito. Ni siquiera me quedaron ganas de poner cuidado al libro de colorear de Minera Panamá ni a las superproducciones de la ACP y el Metro de Panamá, y del Westland Mall (que desde ahora estoy bautizando como MultiChorrera). Encantador el humilde puesto del Miviot, con poltronas Le Corbusier de la más fina cuerina blanca. Lo único fotografiable, unas sillas Faux-elona con un vergonzoso travesaño horizontal entre las patas.
(Esta es una de verdad, para refrescarles las memorias.)
‘la decepción no vista’ es mas de una palabra.
lol @ ‘cuerina’